miércoles, 3 de octubre de 2012

                                   San Felipe en el siglo XIX


No obstante la gravitación de la agricultura, la región poseía otra importante actividad, cuyo influjo le permitió diversificar su base económica. La presencia del camino internacional a Mendoza, a través de la cordillera de los Andes, posibilitó que en sus orillas aparecieran pequeños puestos comerciales dedicados a prestar servicios a viajeros y caravanas. Asociados a estos baratillos y fondas, se fueron conformando posesiones agrarias de dimensiones mucho más reducidas que las de las haciendas, donde predominaba el cultivo de vides, frutales y forraje. Así, el intenso trajinar en torno a la ruta transcordillerana generó las condiciones para que en abril de 1791, unos 25 kilómetros al sur de San Felipe y cerca de una parroquia dedicada a la advocación de Santa Rosa de Viterbo, se fundara la villa de Los Andes.

La naturaleza de las actividades predominantes delineó un estilo de vida distinta en cada una de las dos ciudades. Mientras en San Felipe se impuso el tono señorial y conservador de las haciendas, a Los Andes el tránsito de personas y bienes le otorgó un espíritu liberal y distendido, más parecido al de un puerto que al de una villa interior. A lo largo del siglo XIX estas características se acentuaron, como consecuencia del auge cerealero que afianzó la posición de las grandes tenencias territoriales y de la entrada en operaciones del Ferrocarril Trasandino en 1910, que reforzó la demanda para el comercio y los servicios establecidos en Los Andes.

Hacia la tercera década del siglo XX, estas identidades diversas e incluso antagónicas se fueron diluyendo, ya que la declinación de la agricultura latifundista favoreció la proliferación de la pequeña y mediana propiedad en el sector de San Felipe, mientras que las oportunidades de comercialización en Los Andes permitieron la llegada de inversionistas interesados en capitalizar los predios ubicados en sus inmediaciones. Así, tempranamente en relación a otras regiones chilenas, en la parte alta de la cuenca del Aconcagua surgió un dinámico sector agroindustrial dedicado a abastecer la floreciente demanda proveniente de los principales centros urbanos y enclaves mineros del país.





Opinión: Mi opinión es gracias a los comerciantes dimos pasos para que se hicieran caminos de San Felipe  ha mendoza (Argentina).



Romina Farías Becerra








jueves, 27 de septiembre de 2012

santiago en el siglo XIX.

                             Santiago en el siglo XIX.

Los tranvías de Santiago de Chile fueron uno de los primeros de Latinoamérica, comenzando con los servicios de tracción animal en 1850 aproximadamente, denominados "carros de sangre", los cuales recorrían la Alameda desde la Estación Central de Santiago a la Universidad de Chile.
Hacia fines del siglo XIX comenzó la electrificación del tranvía, tanto de Santiago como de otras ciudades y pueblos, como Villa Alegre. Estos tranvías eléctricos fueron explotados por empresas de capitales alemanas, inglesas, norteamericanas.
Finalmente fueron nacionalizados y estatizados, creándose la Empresa Nacional de Transporte Eléctrico, que luego pasó a denominarse Empresa de Transportes Colectivos del Estado (ETC del E, sus siglas) más conocida como la ETC.
A fines de la década de 1940 aparecen los trolebuses que, con los microbuses, se impusieron al tranvía por la velocidad de viaje, agregando a ello el explosivo aumento del parque automotriz chileno, hicieron que los usuarios del tranvía disminuyeran drásticamente, de manera que el tranvía fue retirado de Santiago (ya había desaparecido del resto de Chile), circulando el último carro en 1957.
En la actulidad existen proyectos para la construcción de tranvías en Quilicura, Maipú, Las Condes y el Aeropuerto Internacional Arturo Merino Benítez

Tranvías de sangre de Santiago
Hacia 1857, el crecimiento de la ciudad de Santiago era pausado y sectores como la Estación Central de Santiago se encontraban distante del centro urbano de la capital, haciendo que el traslado desde la ciudad a la incipiente estación de ferrocarriles, fuera una verdadera odisea. Viendo en esta dificultad una excelente ocasión para invertir, el ingeniero inglés Wallace Buchanan junto a Joaquín Oyarzún solicitaron a la Municipalidad de Santiago los permisos correspondientes para construir y operar un carro de sangre que permitiera el transporte de pasajeros entre la Estación Central y la Universidad de Chile.
                                                                                       transvía 20 asientos 1935 - Santiago.

Opinión: las transvías fueron el principal medio de transporte en la capital facilitando un poco la vida de sus ciudadanos, a la misma vez esto servía para lo turistico de la región.

por: Bárbara Acevedo.

                                      El ferrocarril trasandino

 El Ferrocarril Trasandino Los Andes - Mendoza era una línea ferroviaria que unía la ciudad de Los Andes con la ciudad argentina deMendoza. Su trazado se iniciaba en la ciudad chilena y subía a través del río Aconcagua hasta Las Cuevas, en donde existía un túnel que cruzaba hacia Argentina. Luego, seguía por los ríos Las Cuevas y Mendoza hasta llegar a la ciudad del mismo nombre.
El Ferrocarril Trasandino fue inaugurado el 5 de abril de 1910, y finalizó sus operaciones en 1984. Su trocha era de 1 metro, y en la actualidad varios tramos se encuentran cubiertos por la nieve o están sin sustentación debido a la erosión del terreno.



Opinión: Era bueno para esa época tener ferrocarril que cruzara Chile  y Argentina ya que era el unió medio de transporte rápido que había.


Romina Farías Becerra.

Ferrocarriles en el siglo XIX en Chile - Santiago a Vaparaíso


En 1842, William Wheelwright, presentó al gobierno de Chile un proyecto para la construcción de un ferrocarril entre Santiago y Valparaíso, capaz de cubrir en unas 8 horas el recorrido que hasta ese entonces tomaba varios días. Dicho proyecto fue aprobado.
En un decreto de ley del 19 de junio de 1849, el congreso otorga a Wheelwright el derecho exclusivo por treinta años para la construcción y explotación del ferrocarril.
Wheelwright debió entonces viajar a Europa para conseguir inversionistas para la compañía, pero por desgracia, el viejo continente pasaba en ese momento por una fuerte crisis económica y política, por lo que sus intentos fueron infructuosos. Entre tanto, en Chile, el gobierno miraba su construcción como una necesidad imperiosa y por ello decidió prescindir de Wheelwright.

Esta imagen representa claramente uno de los ferrocarriles más populares en el siglo XIX que viajaban desde Santiago a Valparaíso.
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Mediante un decreto del 28 de agosto de 1851, se autorizó al gobierno para organizar una sociedad con capitales chilenos. Se constituye con ello la Compañía del Ferrocarril de Santiago a Valparaíso, una sociedad por acciones con un capital de cuatro millones de pesos. De las cuatro mil acciones, el Estado era dueño del 50%, con dos mil acciones; Matías Cousiño de un 20% con ochocientas y Candelaria Goyenechea y Josué Waddington, de un 15% cada uno con seiscientas acciones.
Los tres principales accionistas privados de la compañía poseían grandes fortunas formadas en la minería o el comercio y además de ello valiosas haciendas en el valle de Aconcagua, lo que sin duda fue determinante para la elección posterior del trazado definitivo de la vía.
Se estudiaron originalmente tres posibles rutas: una de ellas pasaba por los pueblos de Casablanca y Melipilla, la segunda se internaba por el valle del Aconcagua hasta Los Andes, para atravesar luego por Montenegro y Alto del Puerto; y la tercera, por las cuestas de Lo Prado y Zapata.
Desde el principio surgieron los problemas. La construcción del túnel de Punta Gruesa, entre Valparaíso y Viña del Mar, por una parte y las dunas de Concón que impedían la construcción del terraplén, por otra, retrasaron enormemente los trabajos. Debido a desacuerdos con la compañía, Campbell renunció en 1853 regresando a Estados Unidos por lo que debió ser reemplazado por su asistente William Robertson.

Opinión: En los siglos pasados los ferrocarriles eran los medios mas importantes para transportar diversos productos desde nuestra capital al puerto del país (Santiago - Valparaíso) 
Era un medio de transporte muy utilizado en esos tiempos y muy famoso 
Ivanna Jamet Farías <3

EL FERROCARRIL

                                                  EL FERROCARRIL


La historia del ferrocarril en Chile ha pasado por diversas peje gato y periodos de auge y decadencia. Esta se inició a mediados del siglo XIX con la construcción del primer ramal en la zona norte (desde Copiapó a Caldera), extendiéndose en la actualidad desde Iquique hasta Puerto Montt, existiendo muchos tramos abandonados. Existieron además 4 ramales internacionales: uno desde Arica a La Paz en Bolivia; otro desde Antofagasta a La Paz (actualmente sólo funciona hasta Cochabamba); entre Antofagasta y Salta (Argentina); y un corredor bioceánico entre Valparaíso y Buenos Aires. Además existió una red en la isla grande de Chiloé, además de un sinfín de ramales abandonados completamente

El primer ferrocarril: De Caldera a Copiapó
El 25 de diciembre de 1851 fue inolvidable para Copiapó. Al ritmo de campanas y silbatos el primer tren que hacía un trayecto completo desde Caldera hizo su entrada a la llamada capital de la plata, arrastrado por una locomotora bautizada con el mismo nombre de la ciudad: La Copiapó.wachureo wachureo
Fue el triunfo de la voluntad del empresario William Wheelwright, estadounidense avecindado en Chile, quien luego de impulsar con éxito la fundación de la Pacific Steam Navigation Company, se embarcó en la empresa de desarrollar el primer ferrocarril en Chile. Consiguió interesar a varios acaudalados empresarios, obteniendo un capital inicial de 800 mil pesos de la época. El 20 de noviembre de 1849 el gobierno de Manuel Bulnes le entregó la concesión definitiva a la naciente Compañía del Camino Ferro-Carril de Copiapó.

LOCOMOTORA
 
La elección de la zona no fue al azar. En 1832 el humilde leñador Juan Godoy descubrió el enorme yacimiento de plata de Chañarcillo, en la misma zona. La necesidad de transportar el mineral del interior a la costa, sumado a la abundancia de capital, favorecieron el desarrollo del "caballo de hierro" en este valle.
Las obras se iniciaron en marzo de 1850. Estuvieron a cargo de los ingenieros norteamericanos Walton Evans y de los hermanos Alejandro y Allan Campbell. La trocha (ancho de vía) elegida fue la normal europea (1,435 metro) y el trazado del puerto al interior fue el mismo que se conserva hoy, si bien la vía original fue reemplazada por la trocha de la red norte (1 metro) a principios del siglo XX. Las locomotoras y el material rodante complementario se encomendaron a la fábrica Norris & Brothers de los Estados Unidos, la misma que construyó muchas de las poderosas máquinas que abrieron la senda al Oeste. El equipo llegó el 21 de junio de 1851 a Caldera a 30 kilómetros por hora.
Thomson cuenta que Wheelwright intentó inaugurar el primer tramo el 4 de julio para hacerlo coincidir con la independencia de Estados Unidos pero no fue posible. La primera prueba tuvo lugar el 29 de julio y fue la primera vez que un tren circuló en Chile. Pero la inauguración definitiva debió esperar hasta que la vía llegase a Copiapó.
A contar del 1 de enero el tren efectuó un recorrido diario. Salía de Copiapó a las 9 de la mañana y llegaba a las 13.00 a Caldera. A las 15 iniciaba su regreso del puerto para arribar a la ciudad a las 18:30. Para quienes viajaban en primera clase el pasaje costaba 4 pesos y dos reales. Si se viajaba en segunda, 2 pesos y un real. La carga pagaba 4 reales por quintal. Dos veces por semana corría un tren-correo en cuyo último coche funcionaba un banco de juegos llamado "la timba", que aligeraba los bolsillos de los esforzados mineros aficionados a las apuestas.
La vía fue extendida luego a los poblados cercanos de Puquios y San Antonio y se construyó una estación en Copiapó. También adquirieron la ruta a Chañarcillo, con lo que se completaron 142 kilómetros de vía. Wheelwright soñaba con un ferrocarril transcontinental pero, aunque obtuvo concesiones en Argentina, le faltaron 400 kilómetros de un total de 1.375 para completar su sueño.
Durante 58 años el ferrocarril fue administrado por particulares pero el decaimiento de la minería y las altas tarifas cobradas concluyeron en una campaña para que lo adquiriese el Estado, lo que ocurrió en 1910.
No fue, como asegura el mito, el primer ferrocarril de Sudamérica. En realidad fue el tercero. El servicio Callao-Lima (14 km) comenzó en abril de 1851, mientras que el de Georgetown-Plaisance (8 km) en la Guayana Británica cubrió por primera vez ese tramo en noviembre de 1848. No obstante, Thomson destaca que de todos ellos es el único del cual se conserva la locomotora.


                       

OPINION  : ENCONTRE QUE FUE IMPORTANTE TENER EL PRIMER TRANSPORTE EN ESOS TIEMPOS ,TANTO COMO AHORA QUE ES MUY UTIL E INFALTABLE EN NUETRO PAIS.

NOMBRE :VANIA VARAS.

martes, 25 de septiembre de 2012

Valparaiso en el siglo XIX


Relaciones marítimo - económicas:
Bordeando 1850, Chile había establecido lazos marítimos - económicos con diversos países, cabe destacar: Perú, Bolivia, Ecuador, Estados Unidos (California), Australia e islas del Pacífico Sur.
A estos países se les exportaba: trigo, harina, cebada, plata, oro, cobre, caballos y también llamas y alpacas.
En California, Estados Unidos se vivía la famosa fiebre del oro donde un gran número de norteamericanos y inmigrantes extranjeros buscaban la anhelada fortuna.
Nuestro país vio incrementada la exportación de trigo a esta zona; por supuesto el punto de embarque era Valparaíso y además de Australia y Perú.
Esto disminuyo en la década del 50 debido al autoabastecimiento de Australia y Estados Unidos lo que produjo una caída en la economía.
Se sumo a esto una gran obra arquitectónica de comienzos del siglo XX; el canal de Panamá que hizo declinar la importancia económica de nuestro puerto.
Obviamente el gran número de navíos extranjeros venidos desde distintos puntos del mundo traían gente de diversas culturas y razas que con su asentamiento en Valparaíso daba su toque a la sociedad porteña.


Sociedad Porteña:
Una vez consolidada la independencia de Valparaíso y su consolidación como puerto, (1840) se abre la puerta al mundo occidental; entre otros inmigrantes podemos mencionar ingleses, holandeses, franceses, italianos, alemanes, etc. Cada uno de ellos aportando en la sociedad e incidiendo con el proceso cultural de Valparaíso.
En 1842 se incorpora un rasgo importante, característico de una sociedad industrial: la burocracia. Burocracia en esos tiempos, era la forma de organización más eficiente para realizar tareas administrativas a gran escala.
En 1865 se produce emigración de población rural, que da paso a la población de los cerros, de esta forma se creó una de las características más atrayentes de Valparaíso. Esta ocupación de espacio de plan - cerro trae consigo las costumbres, hábitos y formas de vida en general.
La arquitectura de Valparaíso tiene una apreciable influencia de estilos europeos, en especial los edificios públicos, los locales destinados al comercio y casas particulares de la alta sociedad. Como ejemplo tenemos la catedral de Valparaíso.
Algunas características de esta sociedad industrial eran:
1.- El hombre ya no depende de la naturaleza, sino que la explota y la utiliza. Esto ocurre como resultado de la revolución industrial, el paso de lo manual a lo automático hecho por las máquinas.
2.- Esta sociedad gira en torno a la economía. El hombre de esta sociedad debe ser un productor en lo económico, intelectual, religioso, artístico, etc.
3.- Predomina el status adquirido en oposición a la sociedad tradicional, en la cual predominaba el status asignado..
4.-Es una sociedad burocratizada, por la multiplicidad de ocupaciones y el constante desarrollo de empresas.
5.- Es una sociedad estratificada producto de la división social del trabajo.
6- Se cree en la ciencia, por lo tanto, fe en el progreso y en el progreso indefinido.
7.- Es un tipo de sociedad dinámica que exige a sus miembros una gran capacidad de adaptación, frente a la inseguridad de sus propios procesos de desarrollo.

                                   

                      

   Ignacia Castro Vergara 

Valparaiso en el siglo XIX

Valparaíso durante el siglo XIX. Su importancia económica al funcionar como puerto principal del Pacífico, donde barcos de innumerables banderas atracaban en el, como puerto de escala o de desembarque.

Economía:
Valparaíso, debido a su posición geográfica fue un punto estratégico para el florecimiento de la economía nacional. Puesto que los barcos extranjeros (Estados Unidos, Europa) que pasaban a través del estrecho de Magallanes se reabastecían en Valparaíso luego de la larga y dura travesía.
En el año 1834 se volvieron a abrir los almacenes francos que se crearon en el gobierno de O'Higgins y fueron cerrados por los contrabandos. Además se promulgó una nueva Ley de Aduanas que estimuló al país al liberar del pago de los derechos de internación a los productos provenientes de otros países como maquinarias, libros, etc. También el ministro Reginfo eliminó los derechos del tránsito y otros impuestos.
Esto favoreció que después de un tiempo, Valparaíso se convirtiera en el puerto más importante del Océano Pacífico.
El aumento del comercio marítimo se reflejó en la cantidad de barcos que llegaban a Valparaíso. En 1832, Diego Portales es nombrado gobernador de Valparaíso, cargo en el que despliega sus dotes de administrador: construye un hospital, mejora las escuelas, saca a los ebrios y vagos y mantiene un aseo esmerado por toda la ciudad. En ese año, el número de barcos era de 275, que en dos años aumento a más de 400 navíos. De esta manera la mercancía movilizada entre 1832 y 1834 se acrecentó drásticamente en un 400 por ciento.
Este incremento, obligó al gobierno arrendar bodegas particulares para acoger el gran volumen de mercaderías en tránsito.

Karim Araya Torrejon.

viernes, 21 de septiembre de 2012

transporte marìtimo en el siglo XIX en Chile.

    Transporte marítimo en el siglo XIX en Chile.


La Independencia significó la apertura comercial del país y su inserción en la economía capitalista. Este proceso benefició particularmente a Valparaíso, que a partir de 1830, se convirtió en el emporio comercial del Pacífico, debido a que los barcos mercantes que debían atravesar el Estrecho de Magallanes, encontraban en este puerto el lugar más seguro para almacenar y redistribuir sus mercancías. Asimismo, la estabilidad política del país presentaba condiciones favorables que facilitaron la instalación y actividad comercial de los extranjeros. 

Atraídos por estos factores, se asentaron cientos de extranjeros: alemanes, franceses, italianos y, principalmente, ingleses, quienes se dedicaron al comercio de importación y exportación, ya sea de forma independiente o como representantes de casas mercantiles extranjeras, desplazando rápidamente a los mercaderes nacionales. En breve tiempo, el mundo mercantil porteño se convirtió en el centro de un importante comercio que abasteció al Perú, Bolivia y el noreste argentino; a mediados de siglo, a California y Australia y, a partir de 1880, también al mercado salitrero del Norte Grande. 

De esta manera, Valparaíso se convirtió en el puerto estratégico  de las comunicaciones ultramarinas entre Gran Bretaña, el Pacífico Oriental y el continente asiático. Dentro de este contexto se entiende el interés de los capitalistas británicos en el proyecto de William Wheelwright  de establecer una línea de vapores en el Pacífico con sede en Valparaíso, que constituyó la base de una marina mercante nacional. 
A mediados de siglo XIX, Valparaíso se había convertido en la capital comercial y financiera del país, manteniendo este privilegio hasta la primera década del siglo XX. La ciudad fue el centro del mayor movimiento de capitales y el domicilio legal de la mayoría de las nuevas sociedades y compañías, entre las que se contaron los primeros bancos, ferrocarriles, sociedades mineras e industriales, compañías de seguros y mercantiles. Así mismo, fue la sede de una emergente burguesía mercantil, donde destacaban las familias de mercaderes ingleses del Cerro Alegre. 
                                                   (puerto de valparaíso en el siglo XIX)

opinión: me parece memorable que Chile hubiese sido le primer puerto marítimo de sudamerica ya que eso logró avanzar la economía y desarrollo cultural del país.

de: Estefanía Segura.


viernes, 14 de septiembre de 2012

valparaiso en el siglo xix



                              valparaíso en el siglo xix 


La zona en donde posteriormente se desarrolló Valparaíso fue habitada antes de la llegada de los españoles por los changos, pueblo eminentemente pescador que se trasladaba de un lugar a otro según sus necesidades. Contaban con basas de cuero de lobo para la pesca y se alimentaban, además, de frutos silvestres. El sector que se extendía desde Concón  a la Punta Duprat, donde se encuentra el Molo de abirgo, era conocido por los picunches como Alimapu, que quiere decir tierra arrasada por el fuego; y estrictamente la zona donde posteriormente se desarrolló la ciudad y habitaban los changos era denominada por estos últimos como Quintil.
En medio de su expedición  desde Cuzco hasta el fin del mundo, Diego de Almagro  recibió noticias de que uno de las barcos que venían con abastecimientos, el Santiaguillo, alcanzó una rada que se encontraba a veinte leguas del caserío indígena Cancanicagua, hoy San Felipe. Para reconocer el sitio donde había llegado la nave, Almagro mandó al capitán Juan de Saavedra junto a treinta hombres, quienes dieron con el barco en los primeros días de septiembre de 1536. Saavedra denominó a la bahía en donde encontró a la embarcación como Valparaíso, en honor a su ciudad natal: Valparaiso de Arriba, España. Días después Almagro llegó al valle de Quintil, en donde ordenó reparar el barco para así acompañar por el litoral la expedición de Gómez de Alvarado al estrecho de magallanes. Esta expedición fracasó y prontamente Almagro con sus hombres decidieron regresar a Perú.
Luego de la fundación de Santiago en 1541 por el conquistador extremeño Pedro de Valdivia, dos barcos llegaron a Valparaíso el año1543 con provisiones en socorro del conquistador, y en 1544 arribó la nave San Pedro, comandada por el genovés Juan Bautista Pastene. Valdivia se reunió con el navegante, nombrándolo su lugar teniente en el mar y designando oficialmente a Valparaíso como puerto natural de la ciudad de Santiago, a través de una carta poder escrita el 3 de septiembre de 1544.







Sede mercantil, bolsa de 
comercio de valparaíso 



Opinión : El trabajo da a conocer muchas cosas que pasaron en siglo xix y podemos conocer muchas cosas que ocurrieron en ese siglo



                                              Carla Tapia